EUROPA
PRESS
25 junio
2019
Observan
una sustancia en el cerebro que protege las neuronas de la demencia
Investigadores de la Universidad del
Sur de California (UCS) han descubierto una sustancia secreta en el sistema
vascular del cerebro que preserva las neuronas necesarias para mantener a raya
la demencia y otras enfermedades.
El hallazgo, en un modelo de ratón del cerebro humano, se
centra en células específicas llamadas pericitos y
revela que desempeñan un papel hasta ahora desconocido en la salud cerebral.
Esta células secretan una sustancia que mantiene las neuronas vivas, incluso en
presencia de vasos sanguíneos con fugas que ensucian la materia cerebral y
producen un deterioro cognitivo.
El estudio, que publica la revista 'Nature
Neuroscience', ayuda a explicar la cascada de
problemas que conducen a la neurodegeneración después
de un accidente cerebrovascular o una lesión cerebral traumática, así como en
enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson, y sugiere una estrategia
potencial para la terapia.
"Lo que esta investigación muestra es que si pierdes
estas células vasculares, comienzas a perder neuronas. El vínculo con la neurodegeneración en realidad no estaba tan claro
antes", explica el autor principal Berislav Zlokovic, director del Instituto Neurogenético
Zilkha de la Escuela de Medicina Keck
de la USC.
El descubrimiento se produce en un momento en que los
científicos comienzan a entender la enfermedad de Alzheimer como resultado de
múltiples procesos que comienzan mucho antes de que comience la pérdida de
memoria. Muchos investigadores están cambiando su enfoque de las placas amiloides que se acumulan en el cerebro más adelante en la
vida hacia otros objetivos anteriormente en la línea de tiempo.
Zlokovic, por ejemplo, estudia las capas
de células que forman los vasos sanguíneos en el cerebro. Su investigación
anterior muestra que cuanto más permeables sean los capilares cerebrales de una
persona, mayor es la discapacidad cognitiva que tienen.
Para este nuevo experimento en ratones, Zlokovic
se centró en los pericitos en los vasos sanguíneos
del cerebro. Los pericitos ayudan a regular el flujo
de sangre y mantienen las paredes de los vasos sanguíneos selladas firmemente.
Cuando los investigadores eliminaron artificialmente los pericitos,
observaron una rápida degeneración de la barrera hematoencefálica, una
desaceleración del flujo sanguíneo y la pérdida de células cerebrales.
Para comprender mejor el papel de los pericitos,
los científicos infundieron a los ratones una proteína o factor de crecimiento
secretados por los pericitos en el cerebro y no se
encuentran en ninguna otra parte del cuerpo. Encontraron que, incluso con los pericitos eliminados artificialmente, el factor de
crecimiento protegía las neuronas y las células cerebrales no morían. Los
resultados persistieron incluso con un flujo sanguíneo constreñido.
Debido a que estos pericitos están
implicados en muchas enfermedades, como la enfermedad de Huntington, el
Parkinson, los accidentes cerebrovasculares, los
traumatismos cerebrales y la esclerosis lateral amiotrófica, la investigación
ofrece interesantes posibilidades de investigación adicional. "Esto abre
una visión completamente nueva de la posible patogénesis de la enfermedad de
Alzheimer", concluye Zlokovic.